Proyecto Curricular: Diseño de un Curriculo de Educación media para la zona del Litoral central, en la comuna de Valparaíso, sector del Cerro Cordillera, con principios y conceptos que se basan en el Modelo Pedagogico Social, determinado por el Contexto geografico y humano.
Taller Didactica: Proyecto de ramo "Creación de la Experiencia Social" para el Reconocimiento e Identificación de Vivencias de Valores para la vida personal y social dentro de un marco social determinado por el sector.








jueves, 26 de mayo de 2011

Radio Teatro




Radio Teatro
Escena 1.
Corría el verano del 85 en el balneario de Viña del Mar. Una tarde de enero, un poco antes de la puesta del sol, Roberto vendía palmeras cuando se encuentra con un joven sentado en un roquerío.  Era Julián, quien estaba triste y lloraba mirando al mar con vista fija. Roberto le pregunta por qué llora pero Julián no respondió…
Escena 1. Ruido de mar… Actores: Julián y Roberto. Julián sentado frente al mar con una lagrima en la mejilla...
Roberto: Veenndo palmeras, cuchuflis, ricos los barquilloooss!!
Roberto: Weena guacho, porque esa cara?
Julián: No me pasa nada.
Roberto: ¿Cómo que nada? Si mírate, estay destrozado.
Julián: No tengo ganas de hablar.
Roberto: Arriba el ánimo, cuando la vida te tumba tenis que sonreírle.
Julián: Sonríe.
Roberto: Viste? Suelta la pepa.
Julián: Bueno mi historia es la siguiente…
La historia de Julián era triste, había crecido sin madre, y su padre, quien trabajaba de obrero en una construcción, era alcohólico y profundamente machista. Jamás entendió a la madre de Julián, por lo que ella en medio de una depresión decidió irse a vivir fuera dejando a Julián a cargo de su padre, el padre de Julián siempre tuvo que trabajar muy duro para lograr mantenerse y creía que el hombre había nacido para trabajar, nada le molestaba más que los homosexuales.
Esa mañana Julián había tenido una fuerte discusión con su padre porque al padre le preocupaba la manera de ser “suave” de su hijo, el esperaba que fuera fuerte y decidido, con carácter como deben comportarse los hombres. En vez de eso decía que tenía un hijo afeminado y que se sentía defraudado, todo esto le traía muchos problemas a su ego machista.  
Roberto: Mansa historia, toma te ganaste una palmera amigo.
Julián: ¿Amigo? Amigo!, buena, me llamo Julián, ¿y tú?
Roberto: Roberto para servirle, nos Belmont…

La historia de Roberto es algo distinta pero tenían más cosas en común de las que pensaban. De carácter fuerte y emprendedor se había criado al alero de la señora Carmen, quien lo había recogido de la calle a los cinco años, nunca conoció a sus padres. La señora Carmen se había preocupado de su cuidado pero nunca le entregó afecto de madre, alimentaba a Roberto y le permitía dormir en un pequeño cuarto en el patio trasero de su casa pero a cambio Roberto tenía que trabajar y comprarse sus propias cosas. Teniendo que valerse por sí mismo, pasaba gran parte de su tiempo en parte en la calle de modo que Roberto aprendió desde chico a defenderse por sí mismo pero, al igual que Julián, a sus 16 años aún no había conocido el amor y su carencia de afecto se traducía en rabia contra los adultos en general, con excepción de la señora Carmen de quien se sentía profundamente agradecido.

El papá de Julián por lo general volvía al anochecer a su casa y para entonces Julián debía esperarlo con el almuerzo listo
Escena 2. Actores: Papá de Julián y Julián.
Papá de Julián: Tengo hambre, ven para acá, oye, donde está la botella de vino.
Julián: Por ahí.
Papá de Julián: Me vay a decir que estay apenao? Cuando te vaya volver hombrecito.
Julián: (no contesta)
Papá de Julián: Estoy cansao, me voy a acostar, deja todo lavado que es pa lo único que servis.

A medida que pasaba el tiempo los jóvenes comienzan a demostrarse afecto a tal nivel que la atracción inicial se volvió enamoramiento.
Escena 3. Actores: Julián y Roberto.
Julián: Saludos socio como te baila?
Roberto: Estay aprendiendo, todo bien po. Hoy vendí más de lo común así que estoy contento por eso… y porque te conocí.
Julián: No es pa tanto.
Roberto: Creo que eres una buena persona, ¿Cómo te fue con tu viejo?
Julián: Como siempre.
Roberto: No po guacho, no se trata de eso, usted tiene que demostrarle quien es. Así he aprendido yo a vivir.
Julián: El atardecer está más rojo que nunca, lástima que se acabe el verano.
Roberto: No te preocupis y disfruta los últimos rayos que pronto tenis que irte a tu casa.

 Ambos sabían lo que estaba pasando pero les costaba reconocerlo, sobre todo Roberto quien había tenido parejas antes pero siempre del sexo opuesto, aunque jamás había sentido algo parecido. 
Escena 4.  (papá de Julián, Julián, sra. Carmen, Roberto)
Sra. Carmen: Mishhh! que andamos felices esta mañana, hace tiempo que no te veía así.
Roberto: Es que a veces a uno la vida le sonríe señora, no siempre se puede pasar mal.
Sra. Carmen: Toda la razón.
Relator: mientras tanto…
Papá de Julián: Tss, ¿Y esa carita?, ¿andai enamorao cabro? Espero que sea una mina…
Julián: (con una sonrisa) No me pasa nada, hasta pronto.

Era algo difícil de aceptar, más que nada por la fuerte presión social que por entonces existía frente a la homosexualidad.  Pero las emociones a los 16 años son intensas… Julián y Roberto estaban juntos.
Escena 5. (Julián y Roberto)
Roberto: Que bonito atardecer!, toma, para que compartamos (le pasa una lata de coca cola)
Julián: Roberto, te quería dar las gracias.
Roberto: ¿Porqué?¿Por la bebida?
Julián: No sólo por eso, porque desde que nos conocimos me siento mejor, creo que tengo más confianza en mí mismo. Eres un buen amigo.
Roberto: A mi me pasa algo parecido, nunca antes había tenido un partner para hablar de la vida y de las cosas que pasan, los adultos no entienden nada y los otros cabros de mi edad están metidos en drogas y cosas raras pero yo quiero trabajar y salir adelante como me enseñó la señora Carmen.
Julián: Me gusta eso de ti, que pienses en el futuro, yo también quiero hacer algo cuando grande, me gustaría vivir en otra ciudad, tengo curiosidad por conocer el mundo.
Roberto: Pero lo primero es lo primero, termina el colegio y luego pensai en esas cosas.
Julián: Jajaja, el colegio no me importa mucho, mucho mejor esperar la puesta del sol aquí.
Roberto: Tenis razón, el mejor momento del día, salud por eso.
Julián: Salud! … amigo.
Roberto: ¿Te hay fijado que en el otoño el viento sopla fuerte?
Julián: Si, también el sol se pone antes.
Roberto: tenis razón, pero me gusta esta época, mejor dicho ahora que te conozco me gusta más.
Julián (mirando al piso): (silencio)
Roberto: Cuéntame, ¿te pasa algo?
Julián: Si pero…
Roberto: Pero ¿qué?, dime, me tenis metido.
Julián: Es que…
Roberto: Ya se: tu papá te anda webiando de nuevo, que te dije de cómo teniai que ser.
Julián: No se trata de eso, es sobre nosotros…
Roberto: (silencio)
Julián: ¿Qué piensas?
Roberto: No se, somos amigos pero…
Julián: Es ese pero a lo que me refiero…
Roberto: No quiero dejar de ser tu amigo. (Se abrazan…)

Se juntaban casi de forma obsesiva todos los días, y cuando se podía se veían más de una vez al día, muchos atardeceres abrazados pensando en lo que les depararía el destino. Pero cuando un amor es violento también lo son los desaciertos. Un día la paciencia de Roberto se acabó y le pidió a Julián que si no cambiaba su forma de ser este se enojaría mucho.  
Escena 6 (Julián y Roberto)
Julián: Mira lo que te traje.
Roberto: Gracias Juli, ven que tengo ganas de abrazarte.
Julián: Este atardecer es de los más bonitos que he visto en el último tiempo… las nubes en el horizonte toman un color… café rojizo que me recuerda a mi madre.
Roberto: Yo no conocí a la mía pero me imagino que debe sentirse cálido.
Julián: Contigo siento algo parecido, ya no me siento solo.
Roberto: Te quiero pero el mundo no va a dejarnos tranquilos.
Julián: Si lo se, quizás sería mejor dejar esto hasta aquí… pero no quiero.
Roberto: No digas eso, te he dicho una y mil veces que no seas débil, las cosas hay que solucionarlas de frente.
Julián: Hablas como mi padre a veces.
Roberto: Pero a diferencia de tu padre yo te quiero.
Julián: Gracias por estar conmigo.

Poco a poco el padre de Julián comenzó a sospechar que su hijo estaba enamorado, Julián le decía que era una niña que vivía cerca pero como nunca la presentaba el padre comenzó a dudar de las palabras de su hijo.
Escena 7 (padre de Julián-Julián)
Padre de Julián (llega borracho): Últimamente andai raro cabrito, se me hace que andai enamorado, el problema es que nunca me hay traido una mina a la casa para que la conozca.
Julián: No estoy enamorado.
Padre de Julián: ¿Cuándo te vay a hacer hombre? A los 16 años y todavía no tocai una mujer, me tenis decepcionado, ojalá no me salgai ahora con una sorpresita.
Julián: No hay sorpresas, me voy a acostar.

Padre de Julián: ¿Pa donde vay?
Julián: Tengo sueño, nunca me hablas y cuando tomas te dan ganas de hacerme preguntas.
Papá de Julián: Ten cuidado cabrito que acaso no sabis lo que es el respeto.
Julián: No hay más que hablar.
Papá de Julián: Ya me cabriaste, te voy a sacar la mariconá de una vez por todas… (golpes y llantos de Julián)… y esto que conste que es sólo una advertencia weon…

Julián fue a buscar a Roberto y le contó lo que había pasado, Roberto se enfadó con Julián y sin entender lo que realmente le pasaba le reprochó que fuera débil y que no fuera capaz de enfrentar a su padre.
Escena 8 (Roberto-Julián)
 Roberto: ¿Qué te pasó?...  no me digai nada, el desgraciado te pegó de nuevo.
Julián: Pero no hagas nada raro porque es capaz de matarte si sabe lo nuestro.
Roberto: Julián!, que te he tratao de hacer entender todo este tiempo, ¿acaso no entendis cuando te digo que de una vez por todas le dejis las cosas claras a ese viejo que no se comporta como un padre?
Julián: No es tan fácil.
Roberto: Me decepcionas, creo que ya no tenemos nada que hablar pero  me siento dolido y quiero que lo sepas, hasta pronto.
Julián: Roberto no te vayas… (Llora).

Sin duda que la relación tenía que madurar y necesitaban tiempo para comenzar a aceptarse mutuamente, pero el mundo en que vivían no les permitiría estar tranquilos
Escena 9 (Roberto-Amiga-Julián)
Roberto: Como estay guacha? Tanto tiempo?
Amiga: Bien po, y tú? Que te trae por acá, andan diciendo que pateai en sentido contrario.
Roberto: Solo rumores de gente cobarde, tu sabis que lo mío son las minas o no.
Amiga: El po, el super hombre.
Roberto: ¿Te lo demuestro?
En ese mismo instante aparece Julián por la esquina de la calle, los ve y larga a correr, Roberto ve a Julián alejándose y corre tras de el y lo alcanza.
Roberto: Juliaaaaaaan!!!! Espera Julian!!
Julián: No necesito explicaciones de nada, lo hiciste a propósito.
Roberto: Perdóname!, en serio, estaba enojao y dolido, por favor, trata de entender.
Julián: No hay nada que entender, esto se acabó.
Roberto: Dame una última oportunidad por favor.
Julián: Ya no puedo seguir esta vida de dolor, no quiero seguir viviendo aquí.
Roberto: Vamosnos!
Julián: ¿Cómo?
Roberto: Tengo algo de dinero ahorrado, vámonos a la capital, dicen que ahí son más tolerantes a personas como nosotros. Comenzaremos de nuevo y formaremos una vida de a dos, no te arrepentirás.
Julián: No se si confiar en ti.
Roberto: ¿Acaso puedes confiar en alguien más en esta vida?
Julián: ¿Me quieres?
Roberto: Por supuesto, pero tienes que prometerme algo. Antes de marcharnos tienes que decirle a tu padre la verdad, luego nos marcharemos, sólo así me demostrarás que has intentado cambiar. No te preocupes por su reacción, yo estaré ahí para protegerte.
Julián: mmm, puede ser peligroso, pero algún día tendré que enfrentarlo. De acuerdo.

Escena 10 (padre de Julián-Julián-Roberto)
El padre de Julián llega a la casa borracho y se tropieza en la entrada…
Padre de Julián: ¿Que hace este bolso en la entrada Julián? ¿Pretendis partir pa algún lado? ¿Creis que te mandai solo?
Julián: Ppadre, te presento un amigo, Roberto.
Roberto: Dile la verdad.
Padre de Julián (levantando la voz): ¿Qué verdad? ¿A qué se refiere? ¡Habla pronto!
Julián: Con Roberto nos iremos a la capital a buscar oportunidades. Ya lo tenemos decidido pero vine a despedirme y a agradecerle por alimentarme todos estos años. Viviremos una nueva vida juntos, en algún lugar donde puedan entendernos…
Padre de Julián: ¿Entender qué? ¿Qué son un par de maricones? Eso me queris decir cabro de mierda! , creís que te las vay a sacar limpias! 
Roberto: Nos vamos porque nos queremos y nadie nos detendrá, ni menos tú!…
Padre de Julián: Así que vos erai el motivo por el que mi hijo andaba raro, te voy a cagar conche…
Comienza la pelea… pum, pam, puf, plat, pow, srach (vidrios rotos).
Julián: Paren por favor!! (llorando)  Nooooooooo!!!! (el papá de Julián azota a Roberto con una mesa y este pierde la vida, Julián sale corriendo…).
Julián lloraba de impotencia por no poder hacer nada para evitar la pelea, entre golpes y patadas el papá de Julián habiendo perdido el juicio azota la cabeza de Roberto en la muralla, lo que le provoca la muerte instantánea. Julián no pudiendo creer lo que presencia sale corriendo de la casa hasta llegar a un acantilado sobre un alto roquerío, con el viento en la cara y una densa nube cubriendo el cielo
Escena 11 Julián frente al mar, sobre un acantilado…
Julián: Parece que este mundo no es para nosotros, no se trata de estar aquí o en Santiago, simplemente la vida ya no nos acepta. No puedo seguir viviendo esto, Roberto ya no está y con él se acaba mi razón de vivir. Si existe un mundo más allá de lo conocido posiblemente Roberto esté en él, me estará esperando así que iré a visitarlo, nos veremos otra vez…

FIN.

1 comentario:

  1. La acuarela que aparece de cabecera fue pintada por Matías A. en el taller de pintura de la UNAB, en abril del presente.

    ResponderEliminar